martes, 25 de noviembre de 2008

en honor a ti

Sus ojos entraron a mi distraida mirada como aves de medio paso sobre el rojo cielo dormitante.

Y sentia imposible aqquel sentimiento, hasta que adornnaste con un beso mis labios.

Pero no haasta entonce, cuando me contabas los poros con los dedos, que entendio mi corazon la clave morse del tuyo que golpeaba con arrebato tus costillas.

No hay comentarios: